La creciente conciencia sobre los efectos nocivos del consumo de ingredientes sintéticos, junto con las crecientes preocupaciones sobre la salud debido a la creciente incidencia de enfermedades relacionadas con el estilo de vida, como diabetes, presión arterial, problemas cardíacos, etc., fueron los principales factores que impulsaron el mercado mundial de productos lácteos orgánicos durante el período 2011-2015. El uso aumentado de fertilizantes químicos y pesticidas en productos lácteos no orgánicos está provocando un cambio en las preferencias de los consumidores hacia la adopción de productos lácteos orgánicos.